Sí…
Te extraño mujer, todos los días
Pero de seguro cada día con un propósito distinto a quedarme enredada en tus enredos
Sí…
Aún te amo, te hallo interna en cada suspiro
Pero consciente de que cada vez le perteneces más al recuerdo que a mis ojos
Sí…
Mis lágrimas siempre van dejando tu rastro tras su baile deprimente en mi rostro
Pero poco a poco disminuyen su euforia por salir, van teniendo con el tiempo, menos razones para existir
Sí…
Sé que dije que no quería perderte (y en teoría así es) pero con la nobleza que hice mía
Deseo eso más que perderme a mi misma…
Si ya no eres mía, no es mío el esperanzador aroma del regresar, no es mío el lado oscuro de la luna (ese que nadie ve)
El toque bravo del desapego me ha levantado de arriba para abajo, aceptar la esencia de la existencia en su forma cruda puede que me ayude más que ignorar que no me duele
Me dueles.
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